Proteger nuestras propiedades se ha vuelto una prioridad, ahora que hay un auge claro en los índices de robos y ocupaciones. Ante esa preocupación, muchos clientes no tienen claras las características de las puertas blindadas y acorazadas.
Por ese motivo, hemos diseñado este artículo para ayudarte a conocer las particularidades de cada una y cuál se ajusta mejor a lo que necesitas.
Diferencias entre puertas acorazadas y puertas blindadas
Para empezar, una puerta blindada está compuesta de una estructura de hoja y cerco de madera. Tal estructura tiene refuerzos de acero para hacerla más robusta, a las cuales se suman las bisagras atornilladas, los pestillos y la cerradura.
En cambio, las puertas acorazadas están fabricadas en acero, desde su estructura en hoja y cerco.
Ahora bien, ¿cuál protege más? Aquí hay que hacer varios apuntes.
Por un lado, el acero es más resistente ante armas metálicas que la madera. Así que, si solo nos basamos en eso, puede parecer que las puertas acorazadas presentan mayor seguridad.
Sin embargo, la ley deja bien claro que ya no es necesario fijarse en si es una puerta blindada o acorazada sino en su nivel de seguridad. Actualmente, según la normativa UNE-85160, se puede considerar una puerta de seguridad a partir del nivel 3.
Pero, lo que es evidente, es que la seguridad ya no se mide por materiales sino por los resultados de los ensayos de seguridad y, como consecuencia, de la certificación recibida.
En Arcas Soler contamos con un catálogo donde puedes elegir diferentes modelos de puertas de seguridad certificadas. Además, nos encargamos de la instalación y mantenimiento para que puedas disfrutar de la tranquilidad de saber que tu vivienda está protegida.
Si necesitas más información sobre las puertas blindadas y acorazadas, ponte en contacto con nuestros expertos en seguridad. Te asesoramos con la mejor solución a tus necesidades.
